El Bicentenario está en todos lados, y aunque no podemos hacernos los distraídos, apenas lo rozaremos. De todas maneras, en el mes en que se conmemora el Día del Trabajador no queremos dejar pasar de lado el espíritu revolucionario de mayo, y programamos dos películas del maestro Sergei Eisenstein, junto a algo de cine mudo argentino.
El miércoles 5 de mayo proyectaremos
La huelga (
Stachka, URSS, 1924, blanco y negro, 82 minutos), la ópera prima de Sergei Eisenstein en la que expuso la lucha de clases entre obreros y patrones en la Rusia zarista.
Ese mismo día veremos el cortometraje Mosaico criollo, en copia recientemente restaurada por el Museo del Cine Pablo Ducrós Hicken y el Institituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, como parte de la "Primera antología de cine mudo argentino", que lleva ese nombre.
El trabajo en cuestión data del año 1929 y es la cinta sonora más antigua que se conserva de nuestra filmografía. Fue dirigida por Eleuterio Iribarren.
La segunda y última función del ciclo será el miércoles 19, cuando en nuestro horario habitual de las 20 horas presentemos
El acorazado Potemkin (
Bronenosets Potyomkin, URSS, 1925, blanco y negro, 80 minutos), sin dudas una de las películas más impactantes de la historia del cine que ningún cineclub que se precie puede no tener en su programación alguna vez.
Ya más cerca de nuestra celebración veremos
La revolución de mayo, o lo que queda de ella, en retazos del film que en 1909 realizara Mario Gallo para conmemorar el Centenario de nuestra fecha patria.
Emiliano Penelas
Programador
No hay comentarios:
Publicar un comentario